#136: Swine Hype

Son incontables las contribuciones de México en cuanto a temas globales se refiere. El país azteca ha sido cuna de grandes telenovelas, los chihuahueños, el mariachi, Taco Bell, y actualmente es el centro de uno de los eventos en la aldea global de mayor interés de esta semana: la pandemia de la gripe de los puercos.

La influenza porcina es una enfermedad producida por cualquier variación del virus endémica en los cerdos. Es común la intertransmisión, a veces sexual, entre humanos y marranitos. Por lo general estas infecciones son fácilmente tratables, sin embargo, como cualquier virus, las mutaciones pueden generar cepas que amenacen de manera peculiar al individuo. Ya que gran parte de la población no se encuentra en constante contacto con cerdos [eso si no vive en Dajabón], es común que aparezcan casos aislados, con síntomas similares a la gripe común y una baja tasa de contagio entre humanos.

Este año, una cepa hasta ahora no aislada del virus y de fácil transmisión entre humanos se ha diseminado rápidamente alrededor del mundo, teniendo como epicentro el país de las enchiladas. Esta mutación ha causado la muerte confirmada de varias personas, y así mismo se siguen encontrando casos supuestos y reales que han alarmado a la población global. El hecho de no estar preparado para una pandemia no ayuda en eso de que no cunda el pánico.

Este blog se une a la campaña de información sobre el asunto. Evite que ese jamón que tiene en el freezer se convierta en el causante de su muerte. Vamos pues:

¿Cuáles son los síntomas de la Fiebre Porcina?

Por lo general, el cuadro inicial es el de cualquier gripe estacional: dolor muscular y de garganta, escalofríos, jaquecas, sangrado anal y todos los demás de los comerciales de acetaminofén. Estos casos pueden degenerar en aflicciones graves como una neumonía severa que te haga colgar los tenis, aunque por otro lado hay pacientes que no presentan síntoma alguno [esos mamagüevos].

¿Cómo se transmite?

La principal forma de transmisión es mediante la prensa, televisión e internet. Se sabe también que los cerdos podrían transmitirla a humanos, siendo curioso que en esta última ola infecciosa al parecer la transmisión entre humanos se da con bastante facilidad.

¿Y la cura?

NO HAY [Gritos de desesperación]. La infección común con el vírus suele desaparecer sin demasiado tratamiento. Algunos retrovirales son efectivos como apoyo en el tratamiento, pero debe recordarse que las mutaciones suelen adaptarse a estos tratamientos, por lo que no se recomienda abusar.

¿Cómo prevenir? Aquí algunas ideas:

• Aléjese de los mexicanos. Esto se extiende también a cualquier persona con aspecto enfermizo, con fiebre y tos. También en caso de que lo lleven en una camilla rumbo a una fosa común.
• Desarrolle un trastorno obsesivo compulsivo que lo mantenga lavándose las manos hasta que sangren. Desinfecte superficies comunes con un lanzallamas antes de tocarlas.
• Debido a que el vírus al parecer tiene trazos de vampiro, mantenga ventanas y puertas abiertas durante el día para que el sol se encargue de destruirlo. Una cruz a mano no vendría mal.
• No se coma los mocos que encuentre en la calle. No sabe de quién podrían ser.
• Limítese a comer pollo y talvez res... y lo que sea la carne de los restaurantes chinos. Se ha demostrado que el vírus no se transmite a través de la carne de cerdo bien cocida, pero cabe la posibilidad de que la pandemia sea un plan ideado por la liga del mal porcina, en unión a los judíos pro-kosher y las provocaciones no ayudan en el proceso.
• En caso de tener a un infectado en casa, póngase un traje de látex empapado en keroseno y amárrelo con cadenas en la parte más alejada del patio. Si se resiste, golpéelo fuertemente en la cabeza con el fin de destrozar su cerebro. Así no resucitará para infectarlo.

Aprovechando toda esta información podrá prevenir lo que podría ser el fin de la humanidad como la conocemos. Talvez en nuestra próxima generación sí tendremos carros voladores y trajes plateados. En todo caso, manténgase al tanto del desarrollo de esta noticia que quizá si vaya más allá de la paranoia y sí llegue a pandemia. Ciaito.